Después de tanto tiempo fuera de casa, puedo decir que me siento mejor que en casa.
Los dias se van convirtiendo cada vez mas en rutina y eso te hace darte cuenta de que realmente vives aqui... y que durante los proximos meses esto no cambiara.

Poco a poco voy conociendo a mas gente y vamos sacando mas tiempo para realizar mas actividades en el exterior. Aun siendo un pais nordico, la temperatura es bastante agradable y se puede salir a la calle sin ningun tipo de problema. Aunque tal y como me dijeron cuando llegue... "llueva, haga frio, este nevando o te de mucha pereza... sal porque tan solo son 6 meses".
Con lo que para la proxima semana ya tenemos planeada una escapada al circulo polar, ni mas ni menos que a Kiruna, la ciudad sueca situada mas al norte... "por dios que frio".

Las cosas por aqui... van bastante bien... aqui ando, tomandome un cafecito calentito y riendome de la ultima conversacion que tuve con un buen amigo del bloque.
Mi querida amiga de la planta de arriba, la cual habia pasado varios dias haciendo examenes en su pais hoy por fin volvia... y como no me ha surgido la tipica duda de si "debo o no debo" ir a hacerle una visita... lo cual ha producido que mi vista se fuese al cielo y comenzase a soñar...

Alli estaba, sentado en su puerta, con mi silla de la playa, mi television portatil, mi barba de 7 dias y una torre de cajas de pizzas... cuando ella se aproxima y con cara de impresion pregunta -umm, ¿como tu por aqui?-, -nada... estaba de paso...-.

...y al volver a mi estado normal comence a reirme sin parar... "que simples podemos llegar a ser".

El plan de los lunes no es muy magestuoso... hay cena comunitaria en la sala comun, que todo sea dicho... mas que una sala comun parece el submarino amarillo, ya que la puerta de entrada es una puerta de un submarino, tipica puerta de hierro, con su tirador a modo de palanca y su peso medio de media tonelada. No me resultaba el mejor plan... con lo que he decidido contaros mi situacion actual por este pais.

El domingo pasado nos reunimos mas de veinte personas y nos marchamos con nuestra bicicletas direccion Bjhorda, que es un parque natural que se encuentra en una isla del lago, donde a base de insistir conseguimos hacer una barbacoa y mantenernos calientes durante toda la tarde-noche... toda una velada que habra que volver a repetir... aunque para la proxima tendre que recordar que la bicicleta cansa... y que despues de pasar un dia entero en el campo, si tienes que volverte medio borracho y en bicileta cuesta arriba, no es aconsejable hincharse a hamburguesas, salchichas y albondigas a la parrilla...